El día que los 600km desaparecieron.?

Ser cómplice de historias tan bonitas como la de ellos es un privilegio. Trabajar con ellos ha sido lo más en un año donde organizar una boda era tener cambios en las restricciones día si y día también y jamás les vi perder la sonrisa. Ellos ya son parte de mi familia. Gracias siempre por vuestra confianza en mi a ciegas. ?

24 de julio… hoy ya hace cinco meses de ese día y aún recuerdo el cosquilleo al levantarme, sabíamos que el día que tanto habíamos deseado y preparado había llegado. En casa todo era un caos, familia, niños, fotógrafos, copas rotas y MUCHOS MUCHOS NERVIOS, pero esto solo eran los preliminares de lo que esperábamos fuera nuestro gran día. 

Marina llevaba unos espectaculares pendientes de Carolina Herrera.

Fui partícipe de algunas de sus pruebas del vestido y puedo decir que desde el minuto cero brillaba con luz propia con su diseño de Isabel Hervás.
Sandalias de flordeasoka.

Marina estaba bellísima. Confió en su centro de toda la vida, Violeta Carvajal.

Nos situamos directamente en la iglesia, cuando por fin te veo entrar… en ese momento todo cambia, ya no hay nervios (o al menos no tantos), ya estábamos juntos y empezaba el show. Te veo venir hacia mí y realmente me doy cuenta que no había acertado en ninguna de mis suposiciones sobre cómo sería tu vestido, porque sin duda, era mucho más bonito.”

“Toda la decoración floral fue realizada por Irene Puerto. Un placer coincidir con ella y su equipo.”

Una vez en el altar, te recibo con un beso y con la mirada nos decimos “ya estamos aquí”, por fin empezábamos a disfrutar de todo lo que venía. Nuestro Alberto hace una homilía preciosa, acompañada de las lecturas de mis sobrinos y amigos, nos cuesta aguantar la emoción, sí, pero seguro que no sería la última vez en este día. “

A la salida de la Iglesia nos esperaba un pasillo militar y un espectáculo pirotécnico (como no jajaja), que harían de una simple salida de recién casados, algo espectacular. En ese momento es fácil adivinar nuestra alegría, ya que nuestras caras hablan por sí solas, por fin esta hecho y somos muy felices. Es posible que parezca exagerado, pero el casarnos no contenía únicamente ese significado, si no que hacía realidad aquello que llevábamos tres años esperando a 600km el uno del otro, por fin nuestros caminos se unían.

A partir de aquí es fácil resumirlo, la celebración fue una sucesión de momentos increíbles junto a familia y amigos. Todos, a pesar de venir cada uno de una punta de España, hicieron piña, bailaron, nos portaron e hicieron que el día transcurriese y acabase como queríamos, siendo uno de los mejores días de nuestra vida. Por esto no puedo hacer otra cosa que agradecer a todos su granito de arena para que esto fuera así, a mi familia por suplir las ausencias y estar en todo momento y a un duendecillo que fue nuestra héroe en la sombra e hizo que disfrutáramos del día sin pensar en nada de lo que había que preparar, gracias por todo Mrs. Luna.”

Letterinna y sus bonitos carteles. Y papelería de Bea Arcelus, como siempre un 10.
Reportaje fotográfico de James Richardson.

Pero sobre todo, gracias a ti, a la que ya hace cinco meses que eres mi mujer, cambiaste mi vida el día que te conocí y desde entonces no has parado de hacerlo. Hoy construimos una vida juntos que no para de mejorar y que seguro lo seguirá haciendo por muchos años. Te quiero pequeña.”